Ambos conjuntos de datos muestran que las aguas oceánicas de hasta 2.000 metros de profundidad absorben más calor que en 2021. Específicamente cien veces más energía que la factura eléctrica mundial de cada año.

En el planeta, los océanos absorben el 90% del exceso de calor de nuestra atmósfera y como una esponja que absorbe el agua, el efecto está cambiando fundamentalmente la densidad, la dinámica y la estructura del mar.

Así, el cambio climático ha alterado la interacción entre los océanos, un proceso que ayuda a almacenar la mayor parte del exceso de calor del planeta y una proporción significativa de CO2. El agua de la superficie es más caliente -y por tanto menos densa- que la de debajo, un contraste que se intensifica con estos procesos de altas temperaturas. 

En 2022, por ejemplo, el contenido de calor en los 2000 metros superiores del océano Pacífico alcanzó un nivel récord “por un amplio margen”, afirman los investigadores, “lo que favorece los fenómenos extremos presenciados, como olas de calor intensas y desoxigenación, y supone un riesgo sustancial para la vida marina en esta región.”

Desde OneSea, sabemos la importancia de la divulgación científica para la sensibilización de estas preocupantes temáticas. Por esto parte de nuestras acciones como organización, consiste en la construcción de puentes entre otras organizaciones y sociedad civil, para compartir este tipo de información por los distintos canales y crear conciencia y espacios de participación sobre la realidad de nuestro mares.