Derivados de los plásticos afectan salud de las mujeres
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OneBlog, Fundación OneSea, Costa Rica
La contaminación por nuestras formas de consumo, es uno de los principales enemigos de nuestros océanos, pero estudios en la última década ya señalan los impactos directos del plástico y sus otros derivados químicos en la salud humana.
Los científicos están empezando a descubrir la relación entre cierto tipo de tumores en las mujeres y los ftalatos: sustancias químicas presentes en cientos de artículos domésticos y cosméticos de uso cotidiano.
La realidad de la contaminación plástica
Ya en notas anteriores hemos posicionado nuestra preocupación como organización, sobre la presencia de microplásticos en los artículos cosméticos y domésticos. Dicho escenario, su relación con el género y el uso de estos químicos, está afectando a las mujeres de distintas maneras.
Estudios recientes han encontrado una razón más para alejarnos de estos materiales. Las sustancias químicas denominadas ftalatos, presentes en cientos de productos domésticos, se han relacionado con los fibromas uterinos, tumores no cancerosos del tamaño de una semilla o una bola de fútbol, que crecen dentro o alrededor del útero. Estos fibromas afectan a millones de mujeres y pueden causar dolor pélvico, de espalda, hemorragias menstruales abundantes, dolor durante las relaciones sexuales y problemas reproductivos.
Se sabe que los ftalatos interfieren con las hormonas y han sido objeto de investigaciones sanitarias durante más de una década. Varios estudios han detectado un mayor riesgo de fibromas entre las mujeres expuestas a estas sustancias químicas. En un análisis de cinco estudios realizado en 2017, investigadores de China estimaron mayor riesgo de fibromas en mujeres con niveles crecientes de subproductos de ftalato llamado “DEHP”, una sustancia química que se suele añadir a los plásticos para hacerlos flexibles.
Los ftalatos están presentes en muchos artículos domésticos, desde envases de alimentos, materiales de construcción e interiores de automóviles. Dicha sustancia, también se utilizan como disolventes en cosméticos y otros productos de cuidado personal y para recubrir o encapsular determinadas píldoras farmacéuticas y suplementos dietéticos.
Así, estos químicos pueden filtrarse e introducirse en los alimentos, el aire y el agua, lo que significa que las personas pueden tragar, inhalar o absorber estas partículas de a través del contacto directo con la piel, lo que lleva a nuestro organismo a metabolizar estas sustancias, siendo ya detectados en la orina, la leche materna y la sangre humana.
Esto es alarmante, ya que según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos, la tasa de participación en trabajo doméstico en mujeres es de 41,2 %, y en los hombres es de 26,9 %. Esto plantea una posible problemática de salud pública en nuestro territorio, puesto que las mujeres en su tiempo de trabajo doméstico, se ven porcentualmente más expuestas al contacto con los productos vinculados a los ftalatos.
Vidas y océanos sin plástico
Desde OneSea, queremos impulsar la conciencia por una realidad sin los efectos del plástico. Por eso nuestros proyectos de Paisajes Sin Plástico y de incidencia política, buscan colectivamente reducir el consumo y desecho de estos materiales, mediante soluciones estratégicas y la disposición adecuada de los desechos.
Con El Poder de Todos podemos tener un impacto positivo en nuestros mares, pero también en nuestros cuerpos. Los ecosistemas y nuestras vidas están estrechamente vinculados, por lo que una playa con plástico significa una sociedad predispuesta a las afectaciones de los microplásticos en nuestro cuerpo.
Únete a nosotros y se parte del cambio. ¡No más plástico en nuestras vidas!
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