Los pilares para una economía circular son las acciones en conservación de los recursos naturales. En esencia, el concepto de economía circular pretende garantizar que los productos, materiales y componentes se reutilicen y reciclen dentro de un ciclo y que no sobren residuos al final. De este modo, se diferencia del sistema económico actual, que se organiza según el llamado principio de flujo “tomar, hacer, consumir y disponer”, también denominado “economía lineal”.

Para lograr este objetivo, el concepto de economía circular comienza con el diseño inteligente de productos y materiales y abarca todo el ciclo de vida de estos. Por ello, debería ser posible reciclar un producto en la totalidad de sus partes, hasta el final de su ciclo de vida, y así recuperar las materias primas que contiene. 

Otro factor fundamental de la economía circular, es el pensamiento planetario, que  considera la interacción del consumo y  los recursos a una escala global. De esta manera, en su ciclo se incluye la reducción de materiales innecesarios, el consumo de agua y de energía durante las distintas fases de producción. 

Un informe del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), menciona que este abordaje podría reducir entre un 80% y un 99% los desechos industriales en algunos sectores y entre un 79% y un 99% de sus emisiones de gases.

Fundaciones como Economía Circular, aseguran que se espera que esta transición no sólo reduzca significativamente la carga sobre el medio ambiente, sino que también aporte beneficios económicos. En la medida en que es posible mantener las materias primas valiosas en el ciclo, disminuye la dependencia de las empresas de las importaciones de materias primas, cada vez más caras y a menudo fluctuantes.

La transición de una economía lineal a una circular requiere una transformación integral de nuestra economía, que solo puede tener éxito si cuenta con el apoyo de todas las partes de la sociedad. Se requiere innovación, cooperación y coordinación a lo largo de toda la cadena de valor. 

Desde OneSea, creemos en la posibilidad del cambio en Costa Rica, pero se necesita de un trabajo integral para la información y la educación de todas las y los actores, así como una estrecha colaboración entre la política, la ciencia, las empresas y la sociedad civil. Comenzar el cambio desde nuestras cotidianidades, ya es un avance para un mejor futuro.