Sobreexplotación de Arena Pone en Riesgo Ecosistemas y Comunidades Costeras
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OneBlog, Fundación OneSea, Costa Rica
Solo superada por el agua, la arena es el principal recurso sólido más utilizado a nivel global. La arena es un material esencial para el desarrollo económico dado su papel en los proyectos de construcción, desde viviendas hasta otra infraestructura de mayores dimensiones. La facilidad de acceso a este recurso ha provocado que le restemos atención e importancia, ignorando que como muchas otros recursos, la estamos llevando al límite.
Esta sobre explotación de arena está poniendo en riesgo los ecosistemas marinos y costeros, al igual que ha cientos de miles de comunidades que viven y dependen de las costas a nivel mundial.
Daños irreparables al medio ambiente
Según el último informe del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) cada año se extraen unas 50.000 millones de toneladas de arena en todo el mundo, suficiente para construir todos los años, un muro de 27 metros de ancho y 27 metros de alto alrededor del planeta Tierra. El problema además se agrava ya que su extracción no es regulada ni controlada y se realizan principalmente en zonas como ríos y costas, donde juega un rol activo y fundamental en la protección del medio ambiente.
La arena proporciona refugio y hábitat para una infinidad de flora y fauna. Nos protege contra las mareas y tormentas. Es un elemento vital contra los impactos del aumento del nivel del mar y desempeña una función indispensable de apoyo a la biodiversidad. Sin embargo, su sobre explotación lleva un ritmo acelarado que no podemos controlar y la naturaleza no está siendo capáz de reponerla por medio de sus procesos geológicos. Como consecuencia, las costas están sufriendo serios problemas de erosión, se genera la salinización de los acuiferos y un significativo deterioro en la biodiversidad.
10 recomendaciones estratégicas para evitar una crísis
El informe del PNUMA haciendo honor a su nombre: “Arena y sostenibilidad: 10 recomendaciones estratégicas para evitar una crisis”, presenta la lista de sugerencias que los Estados, la industria y consumidores podemos asumir para enfrentar la problemática:
- Reconocer a la arena como un recurso estratégico para servicios ecosistémicos la construcción de infraestructura
- Elaborar planes justos para regular el uso de la arena, tomando en cuenta las voces de todas las personas afectadas
- Orientar los modelos de explotación hacia un futuro regenerativo y circular
- Adoptar políticas y marcos legales estratégicos
- Establecer la propiedad y el acceso a los recursos de arena a través de derechos minerales y consentimiento
- Mapear, monitorear e informar sobre los recursos de arena existentes para poder tomar decisiones transparentes y basados en la ciencia
- Establecer buenas prácticas, estándares nacionales y un marco internacional coherente.
- Promover la eficiencia y la circularidad de los recursos al reducir el uso de arena, sustituyéndola por alternativas viables
- Practicar la adquisición consciente de arena de manera ética, sostenible y socialmente consciente
- Restaurar los ecosistemas y compensar las pérdidas con conocimiento, medidas de mitigación y soluciones basadas en la naturaleza
En Costa Rica, los problemas del aumento en los niveles del océano, la salinización de acuíferos y la erosión de las playas son consecuencias que ya enfrentan muchas comunidades a lo largo de las costas del país, como por ejemplo en la región Caribe. Es por esto que desde OneSea.org apoyamos nuestras campañas y luchas con procesos participativos para que las comunidades no solo puedan dar su visión de la problemática, sino que además se puedan empoderar del cambio y protección de sus recursos, por medio de sus propias inciativas.
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